Hace un tiempo estuvo en tendencia la venta de los difusores sanitizantes, que en realidad parecen tener grandes ventajas, desde la palabra “nano” que implica su portabilidad y practicidad, hasta el hecho de poder usar líquidos desinfectantes en forma de vapor que garantizan superficies limpias y sanas.
Pero ¿Es en realidad el producto perfecto para evitar enfermedades?
Estos nano difusores, que se han puesto a la venta más que todo en redes sociales, con la promesa de eliminar virus y bacterias, en realidad solo pueden ser usados bajo condiciones estrictas, y no es recomendable su uso rutinario.
Para usar uno de estos aparatos como sanitizante, se debe tener en cuenta cómo funcionan.
En general se encuentran difusores con dos tipos de funcionamiento, unos con vibración ultrasónica y otros con difusión de vapor con calor.
Respecto a los difusores con vibración ultrasónica o humidificadores ultrasónicos, expertos recomiendan el uso de soluciones como el cloro y el alcohol al 70%.
En el caso de los difusores que funcionan con calor, no es recomendable usar cloro o alcohol, pues con el calor pueden perder su efectividad.
Además del funcionamiento, también debe saber qué tipo de superficies se van a desinfectar, ya que estos difusores no tienen efecto en las superficies porosas.
En las demás superficies, el líquido a usar debe ser aplicado por lo menos por 1 minuto para tener efectividad, especialmente en caso del alcohol y el cloro.
Aunque pueden ser efectivos para la desinfección según las variables que mencionamos antes, los nano difusores no fueron creados para uso médico, de hecho fueron creados para hidratar la piel o humedecer parcialmente el ambiente.
Contraindicaciones de los nano difusores
Aunque estos pequeños aparatos pueden ser usados para coadyuvar con la prevención de enfermedades que se transmiten vía aérea, como los resfriados, las gripes y ahora el Covid-19, existen algunos riesgos si no se utilizan de forma correcta y constante.
Debemos conocer los efectos de aspirar partículas de cualquier líquido desinfectante y esterilizante, entre estas, la irritación de las vías respiratorias, lo que puede resultar en dificultades para respirar e incluso infecciones respiratorias.
De hecho en el documento “Limpieza y desinfección de espacios comunitarios durante la pandemia por SARS-CoV-2” emitido por el Gobierno de México en el año 2020, no se recomienda la aplicación rutinaria de desinfectantes por medio de la vaporización de productos químicos, pues pueden ocasionar irritación en los ojos, en la piel y en las vías respiratorias.
En el caso de artículos tecnológicos, se recomienda la desinfección con toallas húmedas desinfectantes, y dejando actuar el tiempo indicado.
No sobra decir, que la mezcla de sustancias inflamables como el alcohol, con productos que usan electricidad o fuentes de calor, representa un riesgo de accidentes, tanto en el hogar como en el sitio de trabajo.
Alternativas a los difusores sanitizantes
La mejor forma de reemplazar los difusores sanitizantes, es lavar las superficies con agua y jabón, limpiarlas con toallitas desinfectantes, o lavarse las manos antes y después de usarlas.
Si lo que deseas es mantener el ambiente seguro para tí y tus empleados, y una buena calidad del aire en el área de trabajo, te recomendamos adquirir un humidificador, o si deseas más beneficios, un difusor de aromas.
En realidad, el difusor y el humidificador son dos cosas diferentes pero fáciles de confundir.
Los beneficios del humidificador casero pueden ser:
- Aliviar la congestión nasal
- Regular la humedad en el aire
- Alivia las molestias generadas por los resfriados y las gripes
- Reduce el riesgo de problemas respiratorios
- Ayuda a hidratar la piel y los ojos
- Brinda una sensación térmica neutral
- Reduce los síntomas de las alergias
En contraste, los difusores de aroma, están diseñados para liberar vapor de agua que será inhalado, ya que por lo general el agua que se usa, se mezcla con aceites esenciales, que se usan en aromaterapia, y que también hacen parte de estrategias de neuromarketing.
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Si usas el difusor solo con agua, puedes obtener los mismos beneficios de un humidificador, la diferencia es que el alcance no es el mismo y no puedes graduar el nivel de humedad.
Algo importante a tener presente, ya sea con difusor o humidificador, es que mantengas los filtros limpios, y secarlos luego del uso, ya que una superficie continuamente mojada es propensa a el crecimiento de hongos, y siempre usar agua destilada, pues el agua de la llave, tiene microorganismos que luego serán inhalados.
El difusor puede ser utilizado en tu negocio con aromas que mantengan a tus empleados relajados, y generen una recordación de marca (Te recomendamos: Marketing olfativo: ¿un aroma podría influir en tus ventas? ), mientras la calidad del ambiente es más saludable, evitas el aire seco, y mantienes todas las medidas sanitarias, para conservar la salud, tanto de los clientes, como de tus empleados.
